lunes, 24 de junio de 2019

Poesía a la japonesa.



 Había una vez... la poesía japonesa.
Traigo aquí el poema más corto. No necesita más para resultar melancolía en estado puro.
No rima, no.
Ni le hace falta, ni se admitía en este estilo. Si había rima se consideraba un error, una locura o dislexia del autor. No van mal encaminados, la esquizofrenia busca la rima.
Vigilaban el número de sílabas. Entendían que la poesía estaba dentro del poema en sí. En su espíritu, no en su letra. Y lo logran, vaya si lo logran.
Este choka -así llamado- tiene un bonito dibujo en sus kanjis japoneses. Tiene un bonito sonar pronunciado en japonés. Pero sobretodo golpea con su significado en el centro del pecho. Me hace preguntarme qué será de mí sin mis niños en casa, cómo será mi vida, cómo será mi corazón. Y por primera vez me siento a contemplar un aspecto de mi mayoría de edad en el que todavía no había pensado. Será que todavía somos demasiado pequeños para verlo.
Ahí va el poema:


瓜食めばUri hameba   Cuando como sandías
子ども思ほゆKodomo OmooyuMis niños me vienen a la mente;
栗食めばKuri hameba   Cuando como castañas
まして思はゆMashite OmowayuLa nostalgia es aún peor.
何処よりIzuko yori   ¿De dónde vienen,
来りしものそKitarishi monozoOscilando ante mis ojos.
眼交にManakai ni   Dejándome desamparado
もとな懸りてMotona kakariteIncesantemente noche tras noche.
安眠し寝さぬYasui shi nesanu
Sin dejarme descansar en paz?

No contento con esto, el autor remata con un tanka (lo que después serían los haikus, cinco versos nada más). Me congratula pensar que en algún momento del espacio- tiempo, hay al menos un viejecito japo que me entiende bien.

銀も Shirogane mo    ¿Qué son para mí,
金も玉も Kogane mo tama mo plata, oro, o joyas?
何せんに Nanisen ni    ¿Cómo podrían ellos
まされる宝 Masareru takara Igualar el mayor tesoro
子にしかめやも Koni shikame yamo que es un niño?