El día que volvió de permiso tras meses de instrucción, a sus hermanillas, que lo habían echado de menos a pesar de su carácter arisco, les pareció a la vez un extraño y un héroe, con su uniforme y su apostura militar.
De alguna manera, se podía ver que por fin estaba de camino a su destino. Y aunque luego la vida le llevó por otros derroteros que le hicieron perder la fe en sí mismo, sus hermanillas guardan el recuerdo de quién es en realidad: el hermano destinado a la gesta gloriosa por altos principios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario